jueves, marzo 08, 2007

Mujeres

Entrevista imaginaria con Sor Juana Inés de la Cruz Siglo XXI

LLEGUÉ PUNTUAL a la cita tal como lo habíamos acordado, era un ocho de marzo como el de hoy, nos vimos en el claustro, eran ya las seis de la tarde así que había muy poca iluminación en el recinto. Ahí estaba ella, seria y con un libro en la mano. No era físicamente como yo la imaginaba, pero no era el momento de cuestionarlo, solo quería ocultar mi nerviosismo y terminar pronto. Por un momento pensé en desistir de la entrevista pues su rostro extremadamente sobrio no me incitaba a nada, de seguro su recio carácter sería un témpano de hielo por romper; con su mano hizo un ademán invitando a ponerme cómodo, tomé una silla y me senté frente a ella. Así que buscando como empezar la charla le cuestioné:

_ ¿Porqué tanta soledad?

Sus ojos cansados por el tiempo voltearon hacia mí y en un tono sereno me contestó:

_Creo que es debido a que siempre he querido aprender, estar un poquito mas preparada de lo que se les permite a las mujeres, pero la soledad muchas veces es mejor que una mala compañía, prefiero estar sola con mis pensamientos.

Su respuesta me dejó mudo por unos instantes, me di cuenta de lo trascendente que podría ser esta platica, al menos para mí. Solo traté de ser coherente en la conversación, y que mis pensamientos machistas no afloraran.

_Creo que he hecho mal en perderle la huella todos estos años, pero dígame ¿Qué ha sido de la vida de Sor Juana en estos últimos tiempos?

Cada pregunta mía la razonaba detenidamente y luego de forma pausada contestaba, parecía que esta mujer no tenía conciencia del tiempo.

_Un poco triste -me dijo- porque no se me permite hacer lo que me gusta tanto: escribir, leer y seguir aprendiendo. Pero dentro de todo me siento feliz de ser una pequeña parte dentro del pensamiento de cada mujer que quiere romper con los estigmas establecidos por la sociedad.

_ ¿Cómo ve usted a la mujer hoy?

_Me parece que no están entendiendo lo que significa que la mujer tenga un lugar importante dentro de la sociedad, en lugar de estar peleando por sus derechos deberían hacer algo que las haga distinguirse, en general creo que se está progresando, pues son más aceptadas y se les permite intervenir en lugares que antes estaban solo reservados a los hombres.

_Eso es cierto, muchas mujeres ya se sienten liberadas, aunque… ¿Usted cree que eso sea una verdadera liberación femenina?

Yo creo que esta pregunta fue el detonante en nuestra conversación, a partir de ahí salió a relucir su fuerte personalidad, poco a poco elevó el tono de su voz y se tornó más expresiva.

_Tal vez si, pero no se trata de una liberación del sexo masculino, de lo que se trata es de que sean respetadas igual que un hombre en todos los aspectos, las mujeres tienen que luchar por lograr su lugar, sin olvidarse de los roles tan importantes que desempeña, como el ser madre, esposa y amiga. Fui considerada rebelde en mi tiempo, pero en la actualidad hay muchas mujeres que son consideradas rebeldes por querer hacer algo que el hombre no les permite, ya sea por un machismo mal fundado o porque las reglas sociales siguen al igual que antaño, a mí me fue muy difícil lograr mis objetivos aunque al final no llegué a consumar todos mis anhelos.

Era brillante Su elocuencia al hablar, su seguridad hacía que cada palabra emitida por ella hiciera eco dentro de mí y se grabará para siempre, Seguramente toda esa sabiduría hizo que sus seguidores le honraran con títulos tan excelsos… para ese momento, sin darme cuenta, mi nerviosismo desapareció.

_Fénix de América, Décima Musa, títulos muy comprometedores ¿No lo cree así?

_ ¡Claro que sí! Esos títulos hicieron que quisiera continuar con mi trabajo de investigación y de escritora, tal vez fueron inmerecidos pero cuando me los otorgaron fue como si me picaran en mi ego para no desistir a los impedimentos que en ese tiempo me acosaban.

_Muchas mujeres mexicanas piensan que no es importante el estudio, incluso dicen que para qué estudiar una carrera universitaria si van a terminar siendo amas de casa y no ejercerán.

_La mujer nunca debe de dejar de prepararse en toda su vida -me interrumpió bruscamente- porque aunque se case, el conocimiento adquirido le servirá para poder educar a sus hijos con una cultura más apropiada y actualizada, porque en algún tiempo podrá volver a practicar o ejercer su profesión, ya que cuando se es madre se debe de dedicar a la educación de sus hijos, pero esto no es impedimento para que continúe aprendiendo y preparándose.

_Me da la impresión de que por equivocación Sor Juana nació en otra época -le comenté-.

_Cada quien nace en el tiempo que le corresponde y se tiene que enfrentar a los desafíos de la época, debo de admitir que envidio de alguna forma a la mujer actual porque cuenta con recursos con los que yo no contaba, estos le sirven para revelarse ante una injusticia, ya que en mi tiempo fue una lucha titánica poder lograr lo que hice.

A estas alturas me encontraba inmerso en la conversación ya no pensaba en cuestionarla sino en escucharla, dejar que las palabras de ella fluyeran por si solas, en pocas palabra me tenía embelesado. Solo para continuar le pregunté:

_ ¿Cuáles fueron sus pretensiones?

_Yo solo quería que me dejaran aprender y cultivarme, que me permitieran expresar mis sentimientos por medio de la escritura, que me dieran libertad de leer cualquier libro como ahora, ya fuera de medicina, teología, física, matemáticas, lo que fuera, mi mente estaba ávida de conocimiento, no quería ser alabada, no, no quería ser reconocida, no… solo pretendía saber.

No nos habíamos dado cuenta de las horas que marcaba el reloj hasta que la campana nos avisó que era el momento de que las monjas se retiran a sus celdas.

_Solo una última pregunta por favor -le dije apresuradamente- ¿Cómo podemos encontrar a la verdadera Sor Juana hoy día?

_En toda mujer que se quiera superar, prepararse, que quiera adquirir conocimientos y no sujetarse a las normas convencionales, ir más allá de lo establecido, en las mujeres deseosas de aprender e ir tan lejos como su propio entendimiento les permita. Yo… yo no tuve opción, si quería cultivarme solo podría recurrir a entrar a un convento, pues la otra opción era casarme con un hombre que no fuera tan brillante por mi condición de bastarda, por desgracia, mi mente brillante no me permitía otro camino. Pero también soy una mujer con sentimientos, ilusiones sueños, anhelos, deseos y convicciones. No solo soy una mujer con mente brillante.

Se levantó, agradeció muy cortés la visita, salió por la única puerta que había en ese tétrico cuarto y sin más ni más desapareció de mi vista. Me prometió que muy pronto nos veríamos, no sé si lo dijo como un cumplido. No me inquieta una segunda entrevista, pues lo que me dejó ésta experiencia es que ahora veo en cada mujer a una Sor Juana Inés de la Cruz en potencia.


Con gratitud a la Lic. Betty Coello, por su colaboración en este escrito.



José Luis de la Cruz Vallejo
®




9 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por tan bonito mensaje a todas las mujeres que queremos salir adelante, es de verdad muy alentador el que un hombre se exprese así de una.

GRACIAS.

Nadaia, Saltillo Coahuila.

Anónimo dijo...

Hola, ..
Eit... que linda entrevista. Esta genial, me encanto ....!!
Gracias por tomar de tu tiempo para escribirnos en nuestro dia cosas tan maraviguanderful...


La dulce Jelen..!

Anónimo dijo...

un agradecimiento x por compararnos con sor juana. animo en todo lo q estas haciendo, llegaras muy lejos. sigue adelante.
Maribel Cabral

Elia Martínez-Rodarte dijo...

Muy chida Jose Luis...Sor Juana es un clásico en el mundo de las mujeres...Saludos

Anónimo dijo...

Guauuu....................hermoso.

Que lindo es saber que todavía hay hombres que aprecien así a la mujer.

Un besoteeee muakkk

Leslie Ruvalcaba, S. l. P.

Anónimo dijo...

Hola amigo mio, desde chile te puedo decir que es muy lindo lo que escribe en su blog y tienes un corazón de oro y no puedo negar que eres un hombre maravillo y un hombre que ama a las mujeres y las respetas,,,gracias hermoso amigo y saludos a todos por aya y te quiero y te espero en chile lueguito

Karla Pravia dijo...

Hola! gracias por tu comentario en mi blog, y bueno soy una fanatica, admiradora y alguien que siente un inmenso aprecio por Sor Juana Inés de la Cruz. Y es cierto, ella mató su soledad con la lectura y el conocimiento. Todo lo que escribiste está muy bien y de verdad encierra la esencia del pensamiento de esa mujer, salvo que debo hacer una acotación como yo, como Karla Pravia, la educación de los hijos debe ser compartido, no algo donde la mujer se forme profesionalmente para limitarse a transmitir esos conocimientos a sus hijos. Saludos!

Alicia Abatilli dijo...

Sor Juana Inés de la Cruz en potencia... Es una expresión de deseo o es una realidad, José Luis?.
Espero con ansias vuestro próximo encuentro.
Gracias por tu entrega, es soberbia.
Un abrazo.
Alicia.

María dijo...

JAAJJJJAAAA